Doble tragedia en los Alpes con seis muertos practicando escalada de hielo

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Bonne Année
Esta es la cascada Bonne Année ubicada en el Valle de Aosta y donde han perdido la vida cuatro alpinistas italianos al desprenderse un bloque de hielo. (Copyright/Effimeri Barbagli/Turismo Valle de Aosta)

Dos escaladores catalanes, uno de ellos mosso d’esquadra, mueren en una cascada de la montaña de La Meije (Francia) y cuatro italianos en la cascada Bonne année del Valle de Aosta (Italia).

La casualidad quiso que el mismo día la escalada deportiva en hielo haya sido noticia luctuosa por partida doble en los Alpes con el fallecimiento de seis alpinistas. En la montaña de La Meije (3984 m) en el macizo des Écrins, ubicada en el límite entre los departamentos franceses de Altos Alpes e Isère, y cercana a la estación de esquí de La Grave, conocida por ser uno de los paraisos del freeride, han fallecido dos alpinistas españoles. Se trata de dos escaladores catalanes. Uno de los fallecidos es un mosso d’esquadra de 39 años de edad y natural de Cistella (Girona) y el otro es un vecino de Figueres (Girona) de 35 años.

El Macizo des Écrins, montaña rodeada de glaciares y rocosas paredes, esta considerado una de las mejores zonas de escalada en hielo de Europa. La muerte fue causada por el impacto de un bloque de hielo desprendido de la pared. Los dos escaladores fueron encontrados todavía encordados y con evidencias de haber recibido un fortísimo impacto en la cabeza. Los dos alpinistas se hallaban en el sector de La Grave y escalando una de las paredes clásicas de la zona, Les Moulins (600m desnivel, III/6), de la larga lista de itinerarios que existen en esta zona.

Cuatro alpinistas italianos fallecen al desprenderse una parte de la pared de hielo Bonne année de 110 metros

La otra desgracia se produjo en el Valle de Aosta. Cuatro alpinistas italianos han muerto cuando escalaban la pared de hielo Bonne année de 110 metros. El bloque de hielo de la pared se ha desprendido y ha lanzado al vacio a los cuatro escaladores. Un quinto alpinista, que se hallaba en la base de la pared, ha salido ileso. Sobre esta cascada la página web del turismo del Valle de Aosta destaca que “es una de las perlas del Valle de Gressoney. Acceso fácil, escalada divertida y atlética, sin riesgos evidentes. Cuenta con la marca de prestigio de la premiada empresa Jaccod-Marlier. Muy concurrida.”
Los dos desprendimientos han podido estar causados por las altas temperaturas nada habituales para la época del año -pleno invierno- que había estos días en las dos zonas alpinas.

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