El Himalaya volvió a golpear con dureza. Siete personas murieron y varias resultaron heridas tras una avalancha que alcanzó una parte del campamento base del Yalung Ri (5.630 m), en el valle de Rolwaling, distrito de Dolakha, al noreste de Katmandú. Entre las víctimas hay cinco extranjeros y dos nepalíes, según confirmaron las autoridades. Las tareas de búsqueda y evacuación continúan condicionadas por el mal tiempo en altura. La valkancha sorprendió a una parte del en el campamento base, ubicado a 4.900 metros de altitud.
Fuentes oficiales y medios locales indican que entre los fallecidos figurarían tres estadounidenses, un canadiense y un italiano, además de dos guías nepalíes. El número de heridos oscila entre cuatro y cinco según partes iniciales, y se reportan desaparecidos a la espera de verificación en la zona. La información es aún dinámica por la complejidad del operativo.
Rescate complicado y permisos en el aire
La evacuación se vio retrasada durante horas por una ventana meteorológica adversa y por restricciones de vuelo específicas en Rolwaling, donde es necesaria una autorización administrativa especial para mover helicópteros de rescate. Varias voces del sector han cuestionado la demora del permiso, subrayando que una intervención más temprana “pudo haber salvado vidas”, en alusión a testimonios de la organización de la expedición y a la normativa aérea en vigor. El episodio llega en plena temporada de otoño, tradicionalmente más voluble en tormentas de nieve. En la última semana, el mal tiempo ha dejado incidencias en distintas cordilleras del país, con rescates en marcha y partes oficiales aún por consolidar.
Montaña de roca, hielo y nieve, el Yalung Ri se considera un cinco mil “asequible” dentro de los picos de trekking y alpinismo nepalí, aunque la inestabilidad nivometeorológica y la exposición en altura convierten cualquier ascenso en un entorno de riesgo.
¿Qué es el Yalung Ri?
Yalung Ri es un cinco mil del valle de Rolwaling en Nepal, cerca de la frontera tibetana, con una altura de 5.630 m. Es una cumbre menos concurrida y muy apreciada por su paisaje salvaje y su ambiente cultural sherpa.
La aproximación suele integrarse en un itinerario de unas dos semanas con salida desde Katmandú hacia Dolakha y Shigati. La ruta atraviesa bosques, terrazas agrícolas y aldeas como Simigaon, Beding y Na Gaon, donde se conservan monasterios, muros mani y banderas de oración.
El ascenso parte del campo base a 4.900 m. No es una vía técnica en sentido estricto, pero exige buena forma física y equipo básico de alpinismo como crampones, piolet, arnés y cuerdas. La progresión se realiza por pendientes y aristas nevadas de dificultad moderada.
Desde la cumbre se disfrutan vistas de Gauri Shankar y Melungtse, además del altiplano tibetano. La aclimatación gradual y la pernocta en teahouses o en campamento en altura forman parte de la experiencia.
Su principal atractivo es la soledad del entorno y la sensación de montaña auténtica lejos de las grandes rutas del Everest y Annapurna. Es una opción ideal para senderistas con experiencia y alpinistas en progresión que busquen Himalaya sin masificaciones y un contacto real con la cultura local.
