Lindsey Vonn volvió a reescribir la historia del esquí alpino al ganar el descenso de Saint Moritz, la primera prueba de velocidad de la temporada 2025-26. A sus 41 años y 57 días, la estadounidense se convirtió en la ganadora más veterana de la Copa del Mundo, sin distinción de género, en una victoria que llega siete años después de su último triunfo.
Casi un segundo de margen en la Corviglia
Vonn firmó un crono de 1.29.63 y dejó el podio prácticamente sentenciado con 0.98 de ventaja sobre la austríaca Magdalena Egger, segunda, y con Mirjam Puchner completando el top 3. El triunfo fue además su victoria 83 en Copa del Mundo y la 44 en descenso, un dato que dimensiona la magnitud de su regreso.
Del quirófano a la cima
El valor del éxito se multiplica por el contexto. Vonn regresó al circuito tras un largo paréntesis y una rodilla derecha marcada por lesiones, con implantes de titanio, para volver a competir al máximo nivel cuando el calendario ya mira hacia Milán Cortina 2026. Su victoria también deja atrás el récord absoluto que había establecido Didier Cuche en 2012, cuando el suizo ganó con 37 años.
En el apartado femenino, la referencia de veteranía había pasado en los últimos años a manos de Federica Brignone, que extendió su propio récord como ganadora más veterana del circuito. El triunfo de Vonn en Saint Moritz eleva el listón a una dimensión inédita. Vonn superó la longevidad de Federica Brignone, que ganó con 34 años. Y aún tiene más valor, porque Vonn estuvo retirada 5 años después de que le tuvieran que reconstruir la rodilla. Su última victoria fue en el 2018. La esquiadora norteamericana tiene previsto retirarse definitivamente después de los Juegos Olímpicos de Milán Cortina 2026.
Top 10 Copa del Mundo de descenso de Saint Moritz
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